viernes, 29 de abril de 2011
Mujeres
No debemos olvidar que esta ciudad se ha levantado con el esfuerzo y sudor de muchas de mujeres. Mi abuela, por ejemplo. Me recuerda mi padre cómo cada día se ocupaba de las labores del campo, cómo una mujer menuda como mi abuela, acudía a la siega sin desatender el cuidado de su familia y su casa. Ella hizo un Parla mejor para sus hijos.
La generación posterior comenzó a integrarse tímidamente en el mercado laboral. No lo tuvieron fácil. Trabajaban fuera y dentro de la casa, se ocupaban -muchas veces solas- de la educación de los hijos y todavía tuvieron tiempo para integrarse en la vida activa de nuestra Parla en el momento de mayor esplendor del asociacionismo. Fueron muchas las que participaron de forma muy activa en asociaciones vecinales, culturales, de mujeres, deportivas… Gracias a todas ellas la ciudad mejoró. Con su esfuerzo para sacar tiempo y dedicación de donde casi no había.
Hoy me acuerdo de ellas mirando a las mis compañeras más jóvenes. Mujeres formadas, cualificadas, que no tienen que renunciar a su profesión ni su vida privada por el simple hecho de ser mujeres. Mujeres activas, que participan en la mejora de la ciudad, en hacer de Parla un espacio mejor para todos.
Muchas mujeres tuvieron que luchar para llegar a la igualdad de la que hoy disfrutamos. Para que puedan trabajar en aquello que les satisfaga, para que puedan ejercer su derecho a la maternidad sin inconvenientes ni complejos, para que, en definitiva, puedan decidir, ejercer y desarrollar la vida que ellas deseen, e incluso para poder ser anderas de la Virgen sin impedimentos ni recriminaciones machistas. Simplemente porque es su derecho como creyentes.
martes, 26 de abril de 2011
Internet: un foro global

Las nuevas tecnologías, las nuevas plataformas, las nuevas puertas de entrada son una bendición para acercarnos donde antes ni imaginamos. Ahora bien, nada de eso se sostiene en el tiempo si no hay un andamiaje de ideas que le aporte empaque. Por eso, desde aquí quiero reivindicar eso que políticos como Felipe González o Jordi Pujol han llamado siempre el discurso y que ahora, nos ha dado por llamar el relato. En resumen, la ideas ¿De qué nos sirve llegara a más gente si luego no tenemos nada solvente que decir? ¿Para qué contactar con gente más joven (o no tanto) si luego nos quedamos en la anécdota? ¿Qué sentido tiene interactuar con gente más preparada si no somos permeables a sus argumentos y nuestros principales comentarios se basan en la crítica irrazonada y el insulto?
Un ejemplo claro de cómo las nuevas tecnologías nos permiten progresar e ilusionar a nuestros vecinos fue el movimiento que impulso Barack Obama. En un sistema tan cerrado como el de Estado Unidos en el que el dinero lo es casi todo, Obama y su apuesta por las nuevas tecnologías, mezclado con un mensaje renovador, atractivo y estimulante lograron un sueño casi futurista. Obama supo ver las posibilidades de la red de redes, pero tenía un programa, un discurso estructurado, un relato que caló en un electorado hastiado por otras formas más rancias de hacer política.
Me considero un aprendiz de todo este apasionante mundo de Internet, admito ser un enamorado de los nuevos recursos y gadgets, me declaro ferviente defensor de este universo que estamos empezando a conocer. No pongamos puertas al campo y admitamos que mi idolatrado Woody Allen está en lo cierto cuando señala: “Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida”.
Y gran parte de esa vida está en un mundo llamado Internet. Os invito a compartir un futuro en común.
miércoles, 20 de abril de 2011
No todo es fútbol

Yo, que siempre vi el deporte como diversión (tanto practicando squash o footing como espectador sosegado), me acerco al fenómeno no tanto como espectáculo sino como práctica que fomenta el crecimiento de la persona. La cita es un poco larga, pero me vino a la mente el otro día cuando firmamos un acuerdo con el Estudiantes para impulsar el baloncesto en Parla. Vino Nacho Azofra, un símbolo del Estudiantes, y la filosofía y los valores remitían a otro hombre de la casa, Pepu Hernández. El técnico, con el que España ganó el Mundial, decía: "El baloncesto no es sólo ganar, que es importante, también es un medio para descubrir valores que sirven en la vida: constancia, formación de nuestro jóvenes, compromiso, respeto... Tenemos una responsabilidad grande en la formación de personas". Para mí, eso es el deporte y eso es lo que nos han demandado los parleños y lo que estamos consiguiendo.
Aquí tenemos dos complejos deportivos, a los que se unirá en unos días el Castillejo, modernos, accesibles y asequibles. Gracias a la colaboración de la empresa privada y el sector público, los parleños disfrutan a precios reducidos de instalaciones y servicios de alta gama. Los complejos de Los Lagos, Parla Este o el nuevo Castillejo son un modelo pionero que ya estudian otros municipios de Madrid y de fuera de nuestra Comunidad. Más de 16.000 parleños ya los disfrutan y serán muchos más. Además, tenemos un deporte de base envidiable, al que queremos potenciar.
Por eso, nuestros deseo de fomentar el baloncesto, lo que vamos a conseguir potenciando a uno de los históricos de la ciudad, La Paz de Baloncesto, a través de su unión con el Estudiantes. Nuestro apoyo al fútbol base, un deporte que en nuestra ciudad genera gran interés y expectación. Mi compromiso con el atletismo, para que siga brillando al más alto nivel y la intención de ofrecer nuevas alternativas que generen en los vecinos el deseo de la práctica deportiva. El balonmano es un éxito, tenis, squash, natación, contamos con uno de los mejores rocódromos de Madrid…
El deporte es algo esencial en la formación integral de la persona, como apuntaba Pepu. Pero quiero abundar en esa idea con unas palabras del tío de Rafa Nadal. Decía que lo que destacaba de su sobrino era la "capacidad de lucha que ya demostraba de pequeñito. Si hay algo que se echa en falta hoy día en cualquier ámbito es precisamente la voluntad de superación, el esfuerzo, la perseverancia y la satisfacción por el trabajo bien hecho".
Es cierto. Ante la especulación, trabajo, más trabajo y esfuerzo; ante el triunfo logrado con atajos, espíritu de superación y perseverancia. Esos valores que transmite el deporte son los que han permitido a esta ciudad crecer y convertirse en un modelo. Sigamos siendo ejemplo de trabajo y superación.
miércoles, 13 de abril de 2011
Orgullo y prejuicio
Los que me seguís a través de este blog, ya sabéis que soy un cinéfilo irredento. Ayer día, al terminar el pleno alguien soltó la frase "los hay que nos sentimos orgullosos de Parla y otros que actúan con prejuicios del pasado". Y en ese momento hice la asociación de ideas con la película Orgullo y prejuicio, dirigida por Joe Wright. No ha sido la única adaptación a la gran y a la pequeña pantalla de esta obra de Jane Austen, todo un referente en Gran Bretaña.
Pues esa frase que capté al oído empecé a relacionarla con la obra y empezó a crecer la idea de que no iba nada desencaminada. Mientras algunos nos afanamos en que Parla sea un enclave moderno, con infraestructuras que la dinamicen, con una sociedad plural y activa, con unas dotaciones dignas del siglo XXI, otros se empeñan en una labor de obstaculización y negación que me abruman.
Cuando veo cómo los alumnos de los institutos de educación secundaria se implican en la X Muestra de Teatro y la calidad de las producciones, solo puedo sentir orgullo. Más de 5.000 personas han acudido a ver las representaciones de estos jóvenes. No son los únicos, la Escuela Municipal de Música también ha puesto en el escenario los progresos de sus alumnos, los 400 chavales que participan en el proyecto Cantania o los que viajan a Estados Unidos para interpretar "Numancia"... Todos ellos son la muestra de que Parla tiene futuro, porque sus jóvenes han decidido que lo tendrá. Ante eso solo puedo mostrar mi satisfacción.
Como estoy encantado con todos los emprendedores que han llamado a la puerta de este Ayuntamiento, y han dejado más de 130 millones de euros, para decir que quieren participar proyectos que día a día mejoran nuestra ciudad. Y los que lo seguirán haciendo. Porque, como ya os he anunciado, tenemos muchos proyectos encima de la mesa.
Uno de ellos el mercado municipal que se construirá en el antiguo cuartel de la Guardia Civil. Un proyecto que engloba comercio de calidad, ocio y cultura es una petición de la juventud de Parla, de muchos vecinos de la zona, de muchas personas que quieren que el centro de la ciudad reciba un impulso. A todos esos parleños que lo han pedido, a todos esos empresarios y autónomos que ven una oportunidad en estos tiempos de crisis, a todos los que se han interesado, les transmito mi gratitud. Y no porque sea un proyecto que abanderamos desde el Ayuntamiento, es simplemente porque se sienten orgullosos de Parla, que quieren hacer de esta ciudad algo mejor y que lo van a lograr a pesar de los prejuicios de algunos.
En el PP abunda los apóstoles del “cuanto peor, mejor”, y nunca les ha importando el progreso de la ciudad ni la ilusión de sus vecinos. Esos, que tienen una gran cartera de propiedades debajo del brazo, nostálgicos de la especulación deberían saber que Parla progresa gracias a sus ciudadanos. Esos augures del inmovilismo, del no al nuevo mercado, del no al PAU 5, del no a todo... esos deberían saber, como se expone en la obra de Jane Austen, que el orgullo y los privilegios de clase ya no tienen sentido en 2011. Y que los parleños, si alguna vez los tuvieron, superaron hace mucho los prejuicios que aún perviven en las mentes de unos pocos.
viernes, 8 de abril de 2011
Qué claridad de confusión

Los que seguís mis twitt podíais leer el otro día la denuncia que me hacía un vecino sobre las carencias que sufrimos en materia de Educación. Me decía que había casi 1.500 adultos en lista de espera para obtener una plaza que les permita mejorar su nivel de conocimientos. A esto hay que añadir que más de 1.000 niños carecen de plaza para Educación Infantil y a todo esto, alguien tiene una brillante idea y propone "la excelencia" para un grupo de alumnos de bachillerato elegidos (¿por quién?). Se me vino a la mente una viñeta de El Roto en el que el personaje leía el periódico y exclamaba ¡Qué claridad de confusión! Pues eso.
Cómo se puede intentar engañar sin pudor alguno. Hablamos de cuando hay carencias básicas. Hablamos de la coexistencia de la Enseñanza pública y la privada, siempre y cuando neguemos recursos a la primera y deslicemos mensajes idílicos sobre la segunda. Hablamos, en resumen, de "clasificar" a los alumnos para que las clases buenas no se mezclen con las malas. Lo dicho, de nuevo hay que "clasificar". Esta política, de la que reniego, es la que sufrimos ahora. Y cuando reclamamos más colegios y escuelas en Parla obtenemos un estruendoso silencio como respuesta.
Claro que si la Educación es un pilar básico del estado del bienestar (esa idea tan socialdemócrata que ahora se intenta desmontar desde el ala más neoconservadora), qué podemos decir de la Sanidad. Alguno perdió el paso y descubrió el pastel que se nos avecina si la Puerta del Sol (Tomás Gómez lo impida) vuelve a pintarse de azul celeste. Copago. Es decir, usted paga dos veces: paga por la Sanidad con sus impuestos y, luego, vuelve a pasar por caja si va al médico. Que no tiene para pagar. Pues qué pena.
Eso es lo que algunos quieren instaurar, mientras que otros denunciamos que la Sanidad pública es más barata (una cama de hospital cuesta la mitad en un centro público que en uno con gestión privada), que el copago no sirve para financiar eficazmente el sistema, que la atención al enfermo hemos logrado que sea universal. Y ese éxito es admirado en todo el mundo. Mientras Estados Unidos pretende acercarse al modelo español, algunos en España pretenden acercarse al modelo del tanto pagas tanta salud tienes.
En Parla arrancamos un hospital; exigimos dos centros de atención primaria; pedimos más personal para los centros, porque no es asumible que por una enfermedad, un centro de salud carezca de consulta pediátrica; imploramos un servicio urgente de ambulancias eficaz... Y ante eso, copago. Parecería una afirmación propia de los hermanos Marx si no fuera porque con la Sanidad no se juega o a lo mejor sí. ¡Qué claridad de confusión!
martes, 5 de abril de 2011
Un adiós modélico
